Translate

viernes, 17 de marzo de 2017

No necesito darte más vueltas.


La emoción de un mensaje nuevo: de tu mensaje nuevo. Comienza a despertar en mí, rabia y nervios al mismo tiempo. Una serie de emociones que se atropellan las unas a las otras en un intento por salir todas a través de esa mueca incongruente de mi cara.
Te leo o no te leo?
Te borro o te brindo un "que tal"?

"Vete". Eso es lo que en realidad quería decirte con mi "que tal". Un "vete" que se ha quedado ahogado en el fondo de mi garganta.


< Antes y después >- eso es lo que empieza mi cabeza a analizar, mientras me pienso que contestarte.
Mi antes de ti. 
Mi feliz ignorancia de tu existencia. 
Y súbitamente: mi después de ti.
Mi constante perdida de la orientación.
Del que quería verte
Del que aun querías verme.
Del que aun pensabas en mi.


"Vete"- resuena de nuevo como bomba en mi. Pero no puedo....la curiosidad por saber a donde quieres llegar es más fuerte.
Aun que puedo intuirlo a cada mensaje que envías. Y es que no podrías ser más evidente aunque quisieras. 
Así pues,es curiosidad o esperanza?

Al dichoso "vete" se le suma ahora el recuerdo de tus constantes idas y venidas. De tus aquí y ahora. De tus hoy no puedo.
Como si de un contraataque mental se tratase,con el fin de ponerle fin a esta perdida de tiempo. Las alarmas de "cuidado" llevan encendidas  en mi cabeza desde que mis ojos visualizaron ese nombre. Entonces,por que sigues?
Y mi dedo frena al instante sobre la pantalla del móvil. Paralizado por tus acciones pasadas. Por el "que hago?"

Lo peor es que sabes que por mucho que ladre este perro no puede morderte. 
.Siempre has sabido como aprovechar mi sed de encontrar ese algo que nunca ha sido tuyo. Mi obsesión por no soltarle la mano a la esperanza y que me susurré que eres tu ese que busco aun no queriendo encontrarle. 
.Siempre has sabido aprovecharte cuando mi garganta estaba seca y mi corazón desesperado.

Pero a diferencia de antes: ya no dueles,ya no siento.
Fuiste,te fuiste y desapareciste de todo sentimiento que un día ancle a ti.
Puede que sólo quede eso,sentimientos. Mas se trata de un sentimiento sin cara ni nombre. Un algo en busca de un alguien que siempre asocio a ti cada vez que vuelves a aparecer.
Quiero pensar que estas palabras no mermaran en mi mente y que,cuando la polilla vuelva a la luz,sabré apagar el interruptor. 
Sabré leer y no responder. 
Mirar y borrar con ese sentimiento sin cara ya desecho.

El tiempo te ha colocado en la casilla de mi vicio. Eso es indiscutible.
De ese chocolate del que no debes comer. Solo esconderlo. 
Pero nunca pudimos conformarnos. Nunca pudimos dejarlo en un ahí.Y siempre acabas saliendo de tu escondite, convirtiéndome a mi también en tu vicio. 
Y es aquí donde me pregunto que parte de ti me concedes en tu mente como para seguir volviendo. Como para seguir acordándote de que yo no me fuy.
Me pregunto que es lo que tanto extrañas de mi. Que es lo que te aportan tantos cafés y terrazas al sol conmigo.

Para mi suerte nunca puede asociar la palabra amor contigo,más si la de obsesión. Una obsesión que he ido curando poco a poco a base de quererme más a mi y alejarme más de ti. Pero por mucho que sepa curarme las heridas, no soy invencible si cada poco regresas,haciendo mella en la herida que creamos. O no lo suficiente...
Cómo olvidarnos si siempre acabas regresando?

-Waisy-

No hay comentarios:

Publicar un comentario